Cine, TV, Video: todo lo que precisa saber sobre Netflix

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Probamos los servicios de streaming de video de Netflix… y los resultados son abrumadoramente positivos.

Internet: todo lo que precisa saber sobre Netflix

Por Alejandro Franco – contáctenos

Canales de cable vs un servicio de streaming por Internet: ¿es una comparación válida?. Ciertamente son dos mundos distintos porque participan de filosofías radicalmente diferentes: en uno está el horario y la casualidad – el zapping por el cual uno termina dando con un programa interesante -; el otro es un videoclub on line, en donde uno elige el show y éste empieza, se pausa y concluye cuando uno quiere, pero que deja el azar de lado, y requiere la investigación (o al menos, el conocimiento) previa del show a elegir. La variedad pareciera menor, pero es mas una sensación térmica que una realidad: que aparezcan “sólo” 20 series de comedia, implica que las mismas están en sus temporadas completas, lo cual da por resultado cientos de episodios – una temporada promedio va de 10 a 20 capítulos -. Lo cierto es que el cambio produce un choque cultural importante: si uno estaba acostumbrado a ver el capítulo de la semana, ahora puede engancharse en una interminable sesión (que puede consumir varios días de duración y numerosas noches de insomnio) para ver las 5 temporadas al hilo de Breaking Bad. ¿Es un cambio para peor o para mejor?. ¿Uno puede acostumbrarse a la selectividad y lo ilimitado, o prefiere el horario, la rutina y la programación acotada?.

Hay una realidad indiscutible y es que el futuro de la televisión pasa por Internet. Se trata de una cuestión de interactividad y de servicios on demand, en donde uno accede a lo que quiere cuando quiere y cómo quiere. A Octubre 2015 Netflix (versión castellana) cuenta con un stock de un poco más de 3.100 títulos entre películas, series – en sus temporadas completas – y documentales, amén del selecto grupo de contenidos exclusivos como Daredevil, House of Cards y Orange is the New Blacklos cuales desbordan de recomendaciones y premios de la crítica -. El punto es si el usuario puede hacer un cambio de costumbres y disfrutar de la canilla libre en la dulcería que supone Netflix.

Habiéndolo instalado hace una cuestión de días, ya tengo un puñado de impresiones que pueden ayudarle a decidirse a futuro si el servicio realmente le conviene o no:

  • si usted no está registrado, Netflix no le permite pegar un vistazo al contenido de su catálogo… pero no se desespere: sitios como http://www.ennetflix.com.ar/ brindan un panorama completo de las películas y series que están actualmente en el servicio, alertando por las inminentes incorporaciones así como los filmes / series que se darán de baja para ser reemplazados por otros nuevos;
  • Netflix se abona sí o sí con tarjeta de crédito, siendo el único medio de pago alternativo PayPal;
  • Actualmente le dan un mes gratis de prueba; para disfrutarlo hay que registrarse, poner los datos de tarjeta de crédito (o PayPal), y comenzar a usarlo;
  • En cualquier momento puede darse de baja de Netflix;
  • Actualmente (octubre 2015) dispone de tres opciones de servicio: uno básico, en el cual se puede recibir videos en resolución standard (hasta 480, simil DVD) en un solo dispositivo y que cuesta u$s 7.99 mensuales; el intermedio, en el cual se pueden conectar hasta dos dispositivos simultáneos, recibe videos en calidad HD (720) y cuesta u$s 8.99 mensuales; y el más alto, que contempla hasta 4 dispositivos, y maneja tanto HD como UltraHD (4K) y sale u$s 11.99 mensuales
  • Los contenidos se pueden ver en smartphones, tablets, computadoras con Windows / Linux / MacOS, smartTV, consolas compatibles (Xbox, etc), sea con conexión propia de Internet (red de datos) o conectado vía WiFi:
  • La velocidad de la conexión de Internet es un factor importante para definir el servicio a utilizar. El servicio básico sólo maneja resolución de hasta 480, los cuales se obtienen con una velocidad de 3 MB. Con menor velocidad la calidad del streaming se degrada pero el video puede verse. En calidad SD (480) puede llegar a consumir 0.7 GB por hora de streaming (como para ir midiendo si lo ve en un smartphone y tiene un paquete de datos limitado por tráfico);
  • El paquete intermedio permite operar con dos dispositivos simultáneos, obteniendo streaming de video de calidad 720 (HD). Se precisa una conexión de 5 MB o superior para calidad HD; a su vez cada video HD consume aproximadamente 3 GB de tráfico por hora. De todos modos no todo el contenido de Netflix está en HD, e incluso uno puede setear la configuración personal para el streaming baje la calidad pero permita la conexión simultánea de varios aparatos – por ejemplo, dos usuarios simultáneos con el pack intermedio pero con una velocidad de Internet de 3 MB -;
  • El paquete superior hace streaming en HD 720 y, si el dispositivo y la conexión de Internet lo permite, en UltraHD 4K. Precisa una conexión de 25 MB para el UltraHD, y el mismo consume 7 GB por hora de pelicula emitida;
  • La calidad de los videos es muy buena y, sobre todo, del sonido (viene con 5.1 en la mayoría de los casos). En la computadora se ve a través del navegador. En los dispositivos Android, hay que bajar una aplicación desde la tienda Google Play
  • El tema de ver videos con calidad en un dispositivo Android depende seriamente de la versión de Android y de la potencia de procesamiento del aparato. Un smartphone básico con procesador de 800 mhz y Android 2.3 (como el Samsung Galaxy Y) permite recibir video pero es una experiencia frustrante ya que va a los saltos. El tema es que una experiencia potable de streaming requiere al menos de Android 4 (o superior) y al menos un procesador dual core. En una tablet como la Noblex 7014 AR la visión en HD es impecable y la calidad de sonido es espectacular (incluso conectada vía HDMI a un TV HD);

  • Usted puede visualizar Netflix en su televisor; si posee un smartTV, la aplicación Netflix viene preinstalada entre el software / opciones que trae de fábrica. En un televisor standard de alta definición se puede ver, siempre y cuando conecte su notebook / tablet vía cable al puerto HDMI. Existe una tercera opción, y es la de adquirir un dongle WiFi como Chromecast: de vista parece un pen drive, pero se conecta vía HDMI a su televisor, y puede recibir todo lo que usted emita desde una tablet o smartphone conectado a la red de WiFi hogareña (se baja la app correspondiente desde Google Play y el streaming de datos es través de la red inalámbrica de su casa). De ese modo usted sintoniza Netflix en su tablet y, con la app abierta, manda la señal de video directamente a su TV, usando la tablet como una especie de control remoto para pausar, avanzar, elegir la película o controlar el nivel del volumen;
  • Al iniciar una película se demoran varios segundos en memorizar datos – buffering – e, incluso, el principio del filme puede verse con calidad degradada o cuadriculada; pero una vez terminado el proceso del buffer, retoma la calidad seteada en parámetros (por ejemplo, HD) y ejecuta el proceso prácticamente sin alteraciones. Es posible que después de una hora el dispositivo inicie otro periodo de buffer (para memorizar los datos restantes del filme) pero, al cabo de unos segundos, la velocidad y la calidad se retoman sin problema alguno;
  • El grueso de los contenidos de Netflix se ofrece con subtitulos en español / inglés / portugués y con audio original / en español / portugués. Es muy raro encontrar un video sin doblaje en castellano.
  • Cuando termina de registrarse, Netflix le pregunta cuántas personas van a usar el servicio. Usted pone los nombres y define si entre ellos hay niños de menos de 12 años. De ese modo filtra los contenidos de manera automática, abriendo un canal totalmente alternativo llamado Netflix Kids y del cual los chicos no pueden salir si intentan manipularlo.
  • Asignados los nombres de los usuarios, Netflix le sugiere un listado corto de títulos (de género muy variado) como para que usted de 3 ejemplos de lo que le gusta. De acuerdo a eso, después le ofrece una programación acorde a sus géneros favoritos. De todos modos, uno puede optar por el índice general y ver el listado total de contenidos o, bien, hacer búsquedas por nombre.
  • Hay muchas películas, pero no espere estrenos del último año. El catálogo de films Netflix llega hasta el 2014. En cambio, el fuerte del servicio son la series: de gran calidad, temporadas completas y una selección marcada por la excelencia. Sumado a eso sus series exclusivas – que sí son producciones 2015 y las actualizan constantemente – forman parte de un apetitoso paquete.
  • Durante la reproducción de un video puede alterar la calidad del streaming, presionando CTRL + ALT + SHIFT + S. Le aparece un menú de opciones de calidad de audio y video; optando por las últimas de la lista (y presionando Override) directamente se salta a la mayor calidad del servicio contratado. Igual, en los perfiles de usuario se puede elegir la calidad de video recibido pero a veces (especialmente al principio de uso del servicio) el seteo no es aplicado, posiblemente porque se ajusta a la velocidad de su servicio de Internet (el cual, en Argentina, dista mucho de ser constante a toda hora).

Es difícil acostumbrarse a vivir sin zapping. No hay publicidades molestas – nada de campañas políticas -, pero tampoco informativos ni los programas de mayor rating de la televisión abierta – aunque los canales importantes suelen ofrecer un servicio de streaming gratuito en su sitios web o vía YouTube -. Los precios de Netflix son de ganga, y el contenido puede verse de manera ilimitada a cualquier hora y en cualquier lugar – vaya a un bar, saque su smartphone, conéctese al WiFi local y siga viendo ese capítulo de Daredevil que tanto le intriga -. Además de películas hay telenovelas enteras, o todas las temporadas de Top Gear. Las sitcom de Sony están en su totalidad. No hay filmes de James Bond, pero abundan los productos Disney / Marvel y hay unas cuantas películas clásicas como De Aquí a la Eternidad o Dr. Strangelove. La oferta infantil es enorme y, por lejos, es lo mas sobresaliente del paquete: el resto depende de los cambios de costumbre que podamos asumir los adultos, quienes – desde la época del televisor blanco y negro con perilla de canales – estamos acostumbrados a pispear de todo cuando estamos aburridos. Acá la exploración es mas limitada ya que, por ejemplo, no hay un canal de trailers como para despertarnos el apetito por una serie nueva o innovadora. Como sea, los pros abundan y superan por goleada a las limitaciones, más teniendo en cuenta su bajo precio, su oferta abundante, la calidad de los contenidos y, sobre todo, su futuro en constante expansión. Es por todo eso que Netflix me parece una propuesta apasionante que bordea lo indispensable, ya que cuesta monedas y está disponible cuando querramos donde querramos… una virtud a la cual no se le puede poner precio.