Los bodrios prosperan en Netflix y ahora es el caso de esta comedia con ribetes dram\u00e1ticos, en donde un grupo de ex alumnas de SNL se pasa de rosca y desmadran el show frente a una directora inexperta que no sabe como disciplinarlas y ponerlas al servicio de la historia.<\/em><\/strong><\/p>\n \n Grupo de cuarentonas en crisis se re\u00fanen, despu\u00e9s de muchos a\u00f1os, para emprender un viaje al “pa\u00eds del vino” – la regi\u00f3n de Napa en California<\/em> -, en donde pueden emborracharse, sacarse las frustraciones de encima y festejar el cumplea\u00f1os n\u00famero 50 de una de ellas (Rachel Dratch). Pero el viaje deja al descubierto sus debilidades y las induce a un estado de revelaci\u00f3n donde descubren el verdadero sentido de sus vidas… o al menos esa es la intenci\u00f3n del filme<\/em><\/strong> porque, en los fotogramas, no aparecen materializadas por ning\u00fan lado. No solo porque la honestidad brilla por su ausencia en el libreto – son todos estereotipos exagerados: la pasada de rosca, la lesbiana zarpada, la sic\u00f3loga extremadamente anal\u00edtica que lleva una vida de porquer\u00eda a pesar de darle consejos a los dem\u00e1s; la que vive para su carrera; la figurita anodina y an\u00f3nima; la miedosa que, para colmo, est\u00e1 a la espera del resultado de una prueba sobre un posible c\u00e1ncer de mama<\/em>\u00a0-, sino porque no hay historia de fondo sino una excusa para la exageraci\u00f3n y la improvisaci\u00f3n. Estos personajes pasan por 10.000 temas por hora y no llegan – en ninguno de ellos<\/em> – a ninguna conclusi\u00f3n importante, y lo \u00fanico que tenemos son gags f\u00edsicos sin demasiada gracia. Todo es muy trivial y te da la impresi\u00f3n de que el equipo de producci\u00f3n aprovech\u00f3 la plata de Netflix<\/strong> para financiarse un viaje a las bodegas californianas en vez de aplicar todo el esfuerzo en el libreto e intentar decir algo interesante.<\/p>\n Al menos Tina Fey zafa porque lo suyo es un cameo extendido, pero el resto deja mucho que desear y ninguna deja una impresi\u00f3n positiva. Como los chistes que dan en el blanco aparecen en cuentagotas – aqu\u00ed y all\u00e1<\/em> – el filme aburre y se vuelve frustrante. Quiz\u00e1s la mayor culpa no sea del cast sino de Amy Poehler como directora, la cual respeta demasiado a sus amigas \/ ex compa\u00f1eras de SNL<\/strong> como para disciplinarlas y ponerlas al servicio de la historia. O quiz\u00e1s sea porque la historia – este viaje est\u00e1 basado en otro que las actrices vivieron hace una d\u00e9cada y que, al parecer, les cambi\u00f3 sus vidas<\/em> – no ten\u00eda las cualidades suficientes como para ameritar una pel\u00edcula, con lo cual todo se hunde en el estiramiento, la banalidad y la falsa profundidad de unas conclusiones que no terminan por interesarle a nadie.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":" Volver al Indice –\u00a0Cine, TV, Video Los bodrios prosperan en Netflix y ahora es el caso de esta comedia con ribetes dram\u00e1ticos, en donde un grupo de ex alumnas de SNL se pasa de rosca y desmadran el show frente a una directora inexperta que no sabe como disciplinarlas y ponerlas al servicio de la … Leer m\u00e1sCine, TV, Video: cr\u00edtica: Entre Vino y Vinagre (Wine Country) (2019)<\/span><\/a><\/p>\n","protected":false},"author":1,"featured_media":0,"parent":0,"menu_order":0,"comment_status":"closed","ping_status":"closed","template":"","meta":[],"_links":{"self":[{"href":"http:\/\/localhost\/datacraft2023\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/18122"}],"collection":[{"href":"http:\/\/localhost\/datacraft2023\/wp-json\/wp\/v2\/pages"}],"about":[{"href":"http:\/\/localhost\/datacraft2023\/wp-json\/wp\/v2\/types\/page"}],"author":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/datacraft2023\/wp-json\/wp\/v2\/users\/1"}],"replies":[{"embeddable":true,"href":"http:\/\/localhost\/datacraft2023\/wp-json\/wp\/v2\/comments?post=18122"}],"version-history":[{"count":0,"href":"http:\/\/localhost\/datacraft2023\/wp-json\/wp\/v2\/pages\/18122\/revisions"}],"wp:attachment":[{"href":"http:\/\/localhost\/datacraft2023\/wp-json\/wp\/v2\/media?parent=18122"}],"curies":[{"name":"wp","href":"https:\/\/api.w.org\/{rel}","templated":true}]}}![\"Cine,](\"http:\/\/localhost\/datacraft2023\/wp-content\/uploads\/foto-wine-country.jpg\" "\\"Cine,")
<\/p>\nPor Alejandro Franco –\u00a0cont\u00e1ctenos<\/a><\/h2>\n
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En general Saturday Night Live<\/strong> no se caracteriza por el equilibrio – cuando la pegan, hacen algo genial; sino, todo es exagerado y hasta grotesco<\/em> -, y lo mismo puede aplicarse a sus alumnos. Surgieron valores perdurables y otros incre\u00edblemente anodinos y molestos – desde Chevy Chase a John Belushi<\/em> -, pero al menos Amy Poehler y Tina Fey ven\u00edan zafando con altura, probando que lo suyo era el an\u00e1lisis fino de las situaciones diarias en vez de la caricatura y salv\u00e1ndose del estigma SNL<\/strong>. Pero ac\u00e1 Poehler quiere lanzar mas alto de lo que le da el brazo y termina haciendo una especie de Sideways<\/strong> con estr\u00f3genos, donde las observaciones son redundantes, no hay pr\u00e1cticamente historia ni conclusiones v\u00e1lidas, y la gracia brilla por su ausencia a pesar de reunir a seis comediantes de talento para la obra. y vista la chapa de Netflix<\/strong>, qu\u00e9 mejor manera de calificarla de “otra mediocridad subsidiada por Netflix<\/strong>, que s\u00f3lo busca vender con la chapa del casting en vez de conseguir un libreto potable”.<\/em><\/p>\n