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Por Alejandro Franco – contáctenos
The League of Extraordinary Gentlemen ( EUA – GB, 2003 ): Intérpretes: Sean Connery, Peta Wilson, Shane West, Stuart Townsend. Dirigidos por Stephen Norrington.
Prosiguiendo con la desigual ola de adaptaciones de comics generado por Hollywood, nos llega esta particular recreación del comic de culto de Allan Moore, creador de entre otros, de From The Hell y Road To Perdition, tambien llevados al cine.
Hay dos maneras de aproximarse a la película: depende de si usted conoce o no qué es el Steampunk.
El Steampunk es un movimiento literario derivado del Cyberpunk; mientras que este último nos resulta algo más familiar (es la ciencia ficción que trata sobre un futuro altamente tecnologizado y donde las maquinas están integradas a los humanos – ejemplos frecuentes se dan en el animé japonés, como el caso de Akira y otros films de animación), el SteamPunk habla de pasados alternativos. Por ejemplo, que en el siglo XIX ya se conocía la energía nuclear, habian viajes espaciales y armas de ultima generación… siempre con los agregados propios de la época. Resulta un planteo altamente fascinante, que invitamos al lector a que investigue buscando en la web. De hecho, la novela gráfica de Moore parte de explosiones en la Luna, posiblemente provocadas por experimentos armamentistas de alguna potencia de la Europa armada del siglo pasado. Se suma a ello, el planteo del comic, con referencias cruzadas a personajes célebres de la literatura fantástica de principios de siglo, planteando que dichos personajes eran, en realidad, los ancestros de los modernos superhéroes.
De esta forma se plantea el comic de LXG: la Reina Victoria siente que el imperio británico está en peligro y llama a su agente secreto más importante… que se llama Champion Bond (abuelo de James Bond !). Este designa a Guillermina Murray (en realidad, la novia de Jonhatan Harker, personajes de la novela Drácula) a que forme un equipo extraordinario para lidiar con una situación extraordinaria. Allí se cruzarán el Dr Jekyll, el Capitán Nemo, el hombre invisible, Allan Quatermain… todos personajes de novelas célebres como el extraño caso del Dr Jekyll y Mr Hyde, 20.000 leguas de viaje submarino, El Hombre Invisible de H.G. Wells, Las Minas del Rey Salomón… con referencias también a novelas de Poe, los mitos de Ctulhu de H.P. Lovecraft, Moby Dick (en el film, el asistente de Nemo se llama precisamente Ismael)… Un universo de fascinantes posibilidades.
Si usted conoce esto, puede aceptar y entender un film como La Liga Extraordinaria. Si no lo sabe, posiblemente esté entre la mitad que la rechaza por absurda o que la acepta, aunque la vé disparatada.
El film plantea diferencias respecto del comic. Por un lado, por problemas de derechos de personajes (aquí no se menciona a Griffin de Wells sino a otro nombre como el hombre invisible). Se incluyen nuevos, como Tom Sawyer, ahora agente secreto (!), y a Dorian Gray. Mina Harker no es la líder sino que es Quatermain (debido a que lo interpreta Connery, que tiene más cartel). Hay un M (como el jefe de James Bond), que recluta a los héroes.
El tema: un supervillano amenaza con provocar una guerra europea, robando secretos a las principales potencias. M recluta a distintos héroes desperdigados alrededor del globo, algunos por ofrecimiento, otros por amenaza; algunos ofreciéndole una cura (como a Mina Harker, que es una vampira); a otros a cambio de una amnistía, como al Capitán Nemo (donde vemos por primera vez, que su origen es de la India Británica, y esto se traduce en su persona como en todo el estilo del Nautilus). atando cabos llegarán a Venecia para descubrir las verdaderas intenciones de la amenaza encarnada en la figura enmascarada de El Fantasma, como se denomina el súper villano.
Hay varios problemas con el film; el principal es que no nos advierte del planteo de un pasado alternativo, sino que nos sumerge directamente en él. Si bien el comienzo tiene un tinte bastante realista, no a cualquiera le puede resultar digerible que, en pleno siglo XIX, hayan automóviles (aunque sean a vapor), ametralladoras y misiles tierra-aire. Súmese a esto algunos gafes realmente grossos (el Nautilus de gigantescas proporciones… navega por los canales de Venecia; la vampira está en la borda del submarino tomando Sol) y un par de errores técnicos (o carencias de presupuesto) como el patético hombre bestia (supuestamente el antecesor de Hulk?). El esquema del film entra dentro de lo standart de cualquier film de James Bond; supervillano quiere dominar al mundo, con la diferencia que aquí se toma su tiempo para mostrar el reclutamiento de un equipo que será el encargado de combatirlo.
Esto no lo convierte en un film malo; tampoco es una obra de arte. Hay muy buenas escenas de acción, la mitad de ellas protagonizadas por el septuagenario Connery que demuestra no haber perdido ni un gramo de potencia y carisma. y aún así, a pesar de semejante ícono, los personajes complementarios ocupan su espacio y tienen sus escenas con diálogos, cuando menos, interesantes. Si bien es cierto que no siempre los efectos visuales resultan buenos, el film es una alternativa más que potable a la hora de entretenerse. Es ágil, tiene buenos planteos, buenas actuaciones y, sobre todo, es original. Le falta algo mas de presupuesto, una mejor factura técnica, y más pulso en la dirección. Probablemente termine transformándose en una pieza rara de culto debido a su singularidad. Pero le recomendamos que se tome un par de horas y se sumerja en esta extraña aventura que, como decimos, pudo haber sido mucho mejor.