Cine, TV, Video: crítica: La Pantera Rosa, con Steve Martin

Volver al Indice – Cine, TV, Video

Meterse con una remake de la clásica serie de Blake Edwards sonaba a sacrilegio, especialmente si alguien que no fuera Peter Sellers encarnaba al inspector Clouseau. Entre la perspectivas de los ultimos films de Steve Martín y la chatura del director Levy, todo presagiaba un desastre de proporciones bíblicas. Sin embargo, el film tuvo un excelente rendimiento en taquilla y el boca a boca superó a la crítica. Veamos el por qué.

Por Alejandro Franco – contáctenos

The Pink Panther (EUA 2006); Intérpretes: Steve Martin, Kevin Kline, Beyoncé Knowles, Jean Reno, Emily Mortimer, Henry Czerny ; dirigidos por Shawn Levy

critica: La Pantera Rosa (2006). Nueva versión de un clásico con Steve Martín encarnando al Inspector Clouseau La Pantera Rosa es el nombre de un film de 1963 dirigido por Blake Edwards, que trataba sobre una serie de enredos de varios ladrones intentando robar el diamante del título, y que eran perseguidos por un torpe inspector de policía. Como comedia, es un semi clásico: está la música de Mancini, el clásico dibujito animado…. pero como película era bastante tibia. Por supuesto, hay escenas que funcionan y otras que no, y en general las que resultaban exitosas eran las protagonizadas por un personaje secundario de la trama, encarnado por Peter Sellers. No pasaría mucho tiempo antes de reconocer que el verdadero valor agregado de The Pink Panther era el Inspector Clouseau (y catapultaría a una serie de films de dispar calidad, basados en el personaje).

Mientras que La Pantera Rosa fue un film sobre valorado, la secuela Un Disparo en La Oscuridad (1964) (la única que no incluye el tema del diamante en su trama) es un verdadero clásico sub valorado. Allí es cuando aparece Cato, el jefe Dreyfuss, y donde la cámara se deleita todo el tiempo sobre las morisquetas de Sellers. Existió otro film, no considerado oficial, que fue Inspector Clouseau (1968), con Alan Arkin encarnando el personaje, ante la negativa de Sellers a encasillarse con el papel. Pero la carrera de Sellers – por problemas personales y riesgosas decisiones artísticas – iría a los tumbos – al igual que la de Blake Edwards – y ambos volverían sobre el mismo camino, comenzando por la tabla de salvación para sus respectivas carreras que sería El Regreso de La Pantera Rosa (1975), y que empezaría una espiral descendente de calidad – La Pantera Rosa Ataca de Nuevo (1976), La Venganza de La Pantera Rosa (1978), El Rastro de la Pantera Rosa (1982 – donde Sellers había fallecido, y se usaban tomas inéditas de archivo para las escenas de Clouseau), y a Edwards le daría el cuero para hacer dos films más, intentando resucitar la franquicia sin Peter Sellers: La Maldición de la Pantera Rosa (1983), y la terrible El Hijo de la Pantera Rosa (1993).

Salvo los tres primeros filmes con Sellers (La Pantera…, Un Disparo… y El Regreso…), el resto de la serie es a lo sumo, mediocre. El timing cómico perfecto de Sellers en Un Disparo… terminó siendo exagerado, ampliado y elevado a la estratósfera, intentando compensar la pobreza de los guiones cada vez menos creativos. Mientras que al principio Clouseau era un tímido burócrata increíblemente torpe, cuyos remates provenían de sus diálogos en gran mayoría, en los últimos filmes ya era un bufón que ametrallaba a la platea con torpezas realmente idiotas. El Clouseau del 63 al 75 hacía burradas que uno podría cometer (y allí tenía su deliciosa gracia, como cuando gira el globo terraqueo, se apoya y se le traba la mano – escena reproducida con otro matiz en la versión 2006 -); pero el Clouseau posterior al 76, y todos los impostores (Benigni, Ted Wass) post mortem de Sellers son patéticos. Debe mencionarse esto antes de gritar ¡sacrilegio! al valorar la nueva versión.

La Pantera Rosa 2006 no es exactamente una remake del film del 63 o de la serie; en todo caso, toma los elementos de la saga y los relanza en una nueva historia. Ya no están las princesas ni el el reino de Lugash, siquiera el ladrón apodado el Fantasma intentando robar el diamante. Acá el director técnico de un equipo francés de futbol (cameo de Jason Stratham) es asesinado en un partido contra el equipo chino, y el anillo con el diamante que usa de cábala desaparece en el tumulto. El director de la polícía intenta desviar la atención de los medios, colocando de fachada a un patético detective como encargado del caso, mientras que él se reúne con las mejores mentes criminalísticas de Francia para resolver el asesinato.

No es un film balanceado. En la mayoría de los casos intenta recrear los excesos que caracterizaban la decadencia del último período de la serie, no siempre con gracia. Shawn Levy sigue siendo un director chato – incluso hay un cameo de Clive Owen como un seudo 007, jugando con los rumores del momento que iba a ser el próximo James Bond, que casi no tiene gracia -, y está también el problema de Steve Martin. Martín es demasiado enérgico, maníaco, es alguien que luce en la comedia física, pero es algo que no va con el Clouseau que mejor recordamos. En cambio, las mejores bazas las obtiene el film cuando Martín se controla y sintoniza a Sellers con su impasibilidad – la secuencia donde aprende inglés es hilarante -. Hay bastantes escenas que toman temas de otros filmes, alterando los finales – la mencionada escena del globo terráqueo, o cuando Clouseau intenta seducir a la cantante en el Hotel y termina en el lobby, después de atravesar el techo – , que están filmadas con bastante gracia. y no sería arriesgado decir que me he reído más con esta versión 2006 que con la última media docena de filmes oficiales de Blake Edwards.

Martín se luce, aunque le cuesta encontrar el timing de su Clouseau; Jean Reno está ok aunque algo reprimido en su papel del ayudante del Inspector; Emily Mortimer destaca como la secretaria enamoradiza del Inspector; quienes en cambio se encuentran fuera de lugar son Beyoncé Knowles – no puede actuar – y Kevin Kline, un actor realmente con gracia pero que está totalmente off side como Dreyfuss – el guión no le da la locura ni el espacio que se merece -.

Sin duda, la taquilla americana le dió un fuerte espaldarazo a La Pantera Rosa 2006, y posiblemente en poco tiempo veamos una secuela. No importa si el film tiene unos agujeros enormes de lógica en el guión; como comedia, es lo mejor que hemos visto del felino rosado en mucho tiempo.