Tecnología: Chromecast Blackout: El dia que millones de usuarios se quedaron sin servicio de Chromecast

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Este pasado 27 de Junio 33 millones de usuarios de los dispositivos Chromecast (y de los smart speakers Google Home) se quedaron sin servicio durante 12 horas. Acá analizamos el fenómeno y las causas.

Tecnología: Chromecast Blackout: El dia que millones de usuarios se quedaron sin servicio de Chromecast

Por Alejandro Franco – contáctenos

No salió en Clarín ni en Infobae; y en contados blogs tecnológicos se hizo alguna mención (como Techcrunch), aún cuando fue un fenómeno de magnitud importante. Es cierto: es mucho mas dramático y masivo cuando WhatsApp o Facebook se caen ya que son globales, pero acá el problema afectó a cerca de 33 millones de usuarios en todo el mundo – a los dueños de los dispositivos Chromecast y Google Home – y, lo mas importante, provino de la empresa de servicios de Internet mas grande que existe en el planeta: la mismísima Google.

¿Qué ocurrió?.

El día que Chromecast dejó de funcionar

La falla comenzó cerca de las 5 de la mañana (hora argentina) del miercoles 27 de junio. En un principio el funcionamiento de los Chromecast parecía normal – se conectaban a Internet, descargaban fotos, mostraban la hora y el clima – pero, súbitamente, resultaba imposible transmitirles cualquier tipo de señal – fuera desde dispositivos Android, enviando la señal de YouTube o Netflix, o desde la PC, espejando la pantalla de la computadora -: simplemente los dispositivos habían desaparecido de la red de Wi-Fi. En mi caso poseo 3 – 2 comprados el año pasado con un mes de diferencia; el tercero, adquirido en Garbarino en Abril de este año -, y como cayeron simultáneamente resulta obvio que no se trataba ni de la partida ni del establecimiento, siquiera de la antigüedad: el icono del rectángulo con las ondas de transmisión no figuraban en dispositivos móviles y, en el caso de Chrome para Windows, el botón se podía pulsar por no hallaba ningún dispositivo Chromecast instalado en la red hogareña de WiFi.

Siguiendo recetas halladas en la web – que recomendaba un reseteo a los valores de fábrica, pulsando por 20 segundos el botón que traen los Chromecast 2 -, probé de reinstalar de cero los dispositivos pero me encontré con un mensaje inesperado: “este Chromecast fue fabricado para usarse en otro país y puede que no funcione con su configuración local de WiFi”. Primero intenté setearlo en Argentina, y el problema subsistía: y lo mismo ocurrió al intentar engañar el aparato setéandolo como Estados Unidos y usando un router diferente, e incluso usan la mini red wifi que permiten armar los celulares con Android. Sin solución posible – y hallando escasas noticias sonre el fenómeno, con testimonios de usuarios de todo el mundo que probaron hacer lo mismo que yo -, busqué en Twitter la cuenta oficial de Google Chromecast @Chromecast, la cual fue convertida en privada (si quieres postear, precisas que te autorice el administrador de cuenta), y apenas hubo una nota al margen en la cuenta de Google Argentina (@googleargentina) diciendo que “Momentáneamente Google Chromecast no está funcionando”.

Pero el Chromecast no fué el único dispositivo afectado. Los smart speakers Google Home también se “colgaron” y, cuando el usuario le impartía una orden, el aparato contestaba con “Lo siento, hay una falla, pruebe en unos instantes” o “Lo siento, ocurrió algo inesperado, reintente en unos segundos”. Después de 12 horas Google publicó un escueto comunicado diciendo que habían encontrado una falla en el backend que soporta a Chromecast y Google Home, y que demorarían 6 horas mas en restablecer el servicio.

Tanto Chromecast como Google Home descargan actualizaciones diarias; bastante se ha criticado la seguridad de estos dispositivos, que son propensos al hackeo. En el patch que arregló todo – a la noche del 27 de junio -, la gente de Google optó por desactivar el servicio del clima (el cual está vinculado con la ubicación física de los dispositivos, y que posiblemente fué lo que trabó el servicio ya que requería que el usuario estuviera en Estados Unidos).

Si bien el número de afectados fue extenso pero no masivo, el comportamiento de Google ante la crisis fue excesivamente escueto a la hora de dar respuestas a los usuarios. Al final sólo admitieron el error y la prevención de que no se repetiría en el futuro, sin dar mayores explicaciones sobre lo sucedido.